La presión y las angustias sociales son los temas centrales de las obras del pintor americano
La fascinación por el caos, las repeticiones y las distorsiones marcan la obra Emilio Villalba. Hasta el día 1 de diciembre se puede ver en la Modern Eden Gallery de San Francisco su nueva serie, Symbols of Death, Signs of Life, en la que el artista da un salto en su particular manera de representar las presiones sociales humanas.
Las miradas disonantes características de sus retratos ahora se encuentran en espacios interiores –donde las proporciones y las perspectivas poco importan– combinadas con alcohol, cigarrillos y otros objetos, generando sus narrativas emocionales desde un punto de vista material.
Emilio Villalba terminó un MFA en Pintura por la Academia de Artes de San Francisco en 2012 y esta es su cuarta exposición individual. Su trabajo, inspirado en grandes pintores de la historia del arte como Velázquez, Mondrian o Philip Guston, trata de representar las urgencias y obsesiones de una sociedad que enferma entre la necesidad de ser humana y las exigencias del éxito.
El impacto de sus obras más recientes reside en las constantes sensaciones de desplazamiento, de desconexión y de fuga, vistas desde la fragmentariedad y la ausencia de sujetos. Sin embargo, son frecuentes los múltiples observadores, los espejos o las representaciones dentro de la representación.
Si bien los personajes de los cuadros tempranos de Villalba ya aparecían distorsionados ante los ojos tensos de los visitantes, aquí estos ojos habitan sus ensamblajes como jueces y testigos de situaciones de exceso y dejadez. Comparten lugar y se yuxtaponen a estos resíduos y, a la vez, “símbolos de muerte”.
Queda a los espectadores la tarea de organizar y de interpretar el puzle cultural que se nos presenta.
Si te ha gustado la nueva serie de Emilio Villalba no dejes de ver sus retratos en su página web o seguirlo en Instagram.
