José Luis Ramírez: “Durango tiene una riqueza visual que no se encuentra en otras ciudades”

Danielle Cruz Por Danielle Cruz
10 Min lectura
El realismo y el pop art se mezclan en una deconstrucción del imaginario social de México

Una pintura social y comprometida es la que percibimos en la producción de José Luis Ramírez (Durango, 1981). El artista retrata con gran realismo a la vez que deconstruye con elementos típicos del pop a los personajes y paisajes de la cultura mexicana.

Lienzos y murales circulan por las galerías del país y cuentan la historia local en edificios emblemáticos. Pero hay más misterio: la mezcla audaz de estilos que José Luis utiliza es resultado de una libertad expresada de manera deliberada tanto en el sentido narrativo como compositivo. Esta libertad, en términos interpretativos, alude también a la compleja sociedad en la que vive.

Al trabajar con diferentes lenguajes y combinar los elementos con ironía, Ramírez busca un entendimiento universal y conciliador. Encuadrarlo en una definición se hace complicado e quizás incluso indeseable. Conocerlo, sin embargo, es esencial.

 

 

 

José Luis Ramírez, Comida Rápida, 2016. Cortesía del artista

 

 

 

P. ¿Cómo empieza tu carrera como pintor?

R. Mi carrera de divide en dos etapas: la que se construye cuando estás en la experimentación visual, incluyendo los estudios que comprenden una carrera en artes plásticas de cinco años en la Universidad de mi Estado, Durango, y la segunda etapa que es la mas importante es cuando comienzas a vivir enteramente de tu producción, a proponer tu obra a museos o galerías y es de alguna manera aceptada y divulgada, cuando se realizan escritos y criticas constructivas y destructivas sobre tu obra. Esta es la etapa mas importante a mi consideración y pienso es cuando puedes decir me dedico a pintar.

 

 

 

José Luis Ramírez, Fosa Común, 2011. Cortesía del artista

 

 

 

P. ¿Qué obra tuya (o serie) se configuró como un pistoletazo de salida?

R. Fue una serie de 35 obras titulada Perro Amarillo, la cual se expuso en un museo de relevancia en México, el Ex Convento del Carmen en la ciudad de Guadalajara. Con esta serie, en el 2009, es donde comenzó la deconstrucción de la imagen como figurativa, comencé a jugar con el accidente controlado y el descontrol total de la figura como tal. Era para mi importante destacar ciertos aspectos de la obra y el resto dejarlo inconcluso. Por supuesto que algunas de estas piezas tienen cierta valía y las demás las taparía por completo, pero finalmente forman parte de un trayecto.

 

 

 

José Luis Ramírez, Levantón, 2011. Cortesía del artista

 

 

 

P. En tu trabajo mezclas con gran ingenio y técnica excepcional el realismo con el imaginario pop. ¿Es posible definir tu estilo? ¿Cómo lo harías?

R. Mi estilo es libre. Siempre he procurado no tener modelos definidos. Los puntos de equilibrio suelen ser las líneas que nacen de la nada y que no tienen absolutamente nada que ver con el contexto general de la obra. Eso es lo que origina un distractor a propósito. La historia es importante en cada una de las obras que actualmente pinto y suelen no tener una serie o formar parte de una. La temática no es específica y los colores puros tomados directamente del tubo sin mezclar es lo que pudiera parecer o dar una idea pop a mi trabajo, pero simplemente es trabajar una superficie que nace del blanco del bastidor y llevarlo hasta sus ultimas consecuencias, con aspectos muy detallados donde rescatar algunas cosas que me parecen importantes y que pudieron ser lo menos importante, y lo demás solo quedara como mancha o como un color que decidí colocar en algún punto específico.

 

 

 

José Luis Ramírez, Los amigos de la calle, 2018. Cortesía del artista

 

 

 

P. Quizás el realismo y mezclado con el pop sea un reflejo de la vida misma y de la impregnación de estos símbolos en nuestra cultura. Sin embargo, los personajes de la cultura de México son frecuentemente foco de este realismo, como un retrato fiel. ¿Voy descifrando bien el juego semiótico? ¿Qué peso tiene la cultura local en tus obras?

R. Bastante, además de que mi país está lleno de muchas subculturas, dependiendo de cada región, ya que el estado donde radico, Durango, está lleno de una riqueza visual que no se encuentra en otras ciudades más viciadas como es el Estado de México o cualquier otra ciudad. Aquí puedo encontrar personajes de una belleza propia característica de mi pequeña provincia.

 

 

 

José Luis Ramírez, Los encuentros y las pérdidas, 2018. Cortesía del artista

 

 

 

P. ¿Qué tipos de personajes?

R. Las subculturas que existen en Durango son muy particulares, sobre todo su música, el silencio de las calles, los barrios y las fachadas de la casa de las de 400 años que se caen y nadie hace nada… Y los personajes de plaza, todo esto mezclado con la narcocultura que existe en todo el México pero que en Durango se respira de manera distinta.

 

 

 

José Luis Ramírez, Mamá con Perros, 2014. Cortesía del artista

 

 

 

P. Otra de las notables características que tiene que ver con lo que decíamos antes es esta “escalada” técnica. Pones en el mismo plano elementos muy refinados y dibujos casi infantiles. ¿Lo podemos considerar una como una “democratización estética”? ¿Un modo de expresar la libertad?

R. Sí, como lo había mencionado anteriormente, la libertad es un elemento característico de mi obra y buscar una conjugación de una expresión sencilla de entendimiento común y universal.

 

 

 

José Luis Ramírez, Pan y Circo, 2014. Cortesía del artista

 

 

 

P. También en términos simbólicos podemos ver este juego: elementos muy folclóricos comparten escena con otros muy contemporáneos. ¿Hay pugna o amor entre ellos?

R. Más que nada busco la unión entre ellos, una armonización de elementos, un equilibrio que a veces se logra y otras no.

 

 

 

José Luis Ramírez, El Tiempo y la Sombra en el Cobijo, 2015. Cortesía del artista

 

 

 

P. En lo que se refiere al proceso mismo de composición, has dicho en otras ocasiones que buscas que los elementos se complementen y se contradigan. ¿Este es un proceso más bien intuitivo o haces una planificación?

R. Intuitivo completamente.

 

 

 

José Luis Ramírez, Te acordarás de mí, 2014. Cortesía del artista

 

 

 

P. Una inspiración diaria y una gran referencia para ti.

R. Mi madre, mi entorno, las lecturas que tengo y un largo etcétera.

 

 

 

 

José Luis Ramírez, Sombra de mi sombra, 2013. Cortesía del artista

 

 

 

P. ¿Hay algún medio o técnica que no hayas intentado todavía pero que lo estés considerando?

R. El grabado. Me parece que son muy amplias las posibilidades de experimentar. Y de jugar con los accidentes del mismo proceso. Lo realicé siendo estudiante y me gustaría retomarlo.

 

 

 

José Luis Ramírez, Mesa de Diálogo, 2011. Cortesía del artista

 

 

 

P. Y por último, ¿cómo ves el arte contemporáneo en México? ¿Qué artistas no podemos pasar sin conocerlos?

R. Los artistas contemporáneos que siento están marcado pauta en el arte actual de México y han marcado profundamente mis obras son Daniel Lezama, Rafael Rodríguez, Julio Galán, Martha Pacheco y, claro, el gran maestro Arturo Rivera.

 

 

 

José Luis Ramírez, Tierra Nueva, 2014. Cortesía del artista

 

 

 

José Luis Ramírez, Miopía, 2013. Cortesía del artista

 

 

 

José Luis Ramírez, Paisaje Azul, 2014. Cortesía del artista

 

 

 

José Luis Ramírez, Yuxtaposición, 2012. Cortesía del artista

 

 

 

Puedes ver más obras de José Luis Ramírez visita su página web o su pèrfil de Instagram.

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Es editora de elemmental. Doctoranda en Comunicación. Estudió Edición y Filosofía. Amante del arte y los nuevos medios. Estuvo antes en el Cultura/s del diario La Vanguardia.