La obra trata temas como la privacidad, el libre albedrío, el marketing digital y la vigilancia
El video falso de Mark Zuckerberg en Instagram de hace un par de días ha sido el gran titular de algunas publicaciones. Los medios convencionales se preguntaban si habría alguna reacción por parte de la red social, si Instagram permitiría que los videos del artista inglés Bill Posters siguiesen en la red. De momento, ahí siguen, pero esta narrativa es completamente simplista aunque atraiga muchos clics.
No hay ninguna intriga. Los videos expuestos en Instagram son parte de la instalación Spectre, de Bill Posters y Daniel Howe, que se dio a conocer en la Site Gallery de Sheffield, como parte del festival Sheffield Doc/Fest ‘Alternate Realities’, evento que tuvo lugar entre el 6 y 11 de junio.
El proyecto cuestiona la utilización de nuestros datos en las redes sociales en el contexto de la filtración de los 87 millones de perfiles de Facebook a través de Cambridge Analytica. Temas como la privacidad, la publicidad online y la manipulación social por parte de las grandes empresas tecnológicas son los grandes focos de la discusión.
Los videos presentados utilizan deepfakes de personajes como Donald Trump, Marina Abramovic, Kim Kardashian, Fred Mercury, Duchamp, entre otros, generados con inteligencia artificial. La instalación funciona a partir de la utilización de los datos de los visitantes, generando así una experiencia completamente personalizada. ¿Les suena?
Spectre es una crítica al sistema actual, donde el marketing digital a través de los perfiles psicológicos altamente segmentados tiene un papel determinante. Bill Posters pone de manifiesto que la mala utilización de estos datos es un riesgo no solo a los derechos individuales como a todo el sistema democrático, y cita como ejemplo la votación del Brexit en Gran Bretaña cuando 7 millones de personas han recibido 1.5 mil millones de anuncios “oscuros” a pocos días de las votaciones. Es, sin duda, un asunto que merece toda nuestra reflexión.
Bill Posters se especializó en las intervenciones urbanas y street art enfocados en la crítica a la publicidad como un modo de subversión (Subvertising). El interés por la publicidad digital ha sido, pues, un paso natural. Puedes leer más sobre el artista y la instalación en la página del proyecto así como en en su perfil de Instagram.