La fotógrafa italiana nos habla de su proceso de creativo
Una buena fotografía es capaz de activar nuestras emociones, provoca nuestra curiosidad, el asombro y toda una gama de sentimientos.
Así lo percibe Cristina Coral. La fotógrafa acumula una serie de premios internacionales por sus imágenes, conocidas por envolver en un halo de misterio, introspección y fragilidad la figura femenina. Sus fotos, expuestas en diversos países, han aparecido también en publicaciones como Vogue Italia, Huffington Post, Inside Art, Lens Culture, Musée Magazine, entre otras.
Cuidadosamente ambientadas y con un fuerte apelo editorial, las obras de Cristina Coral tienen un gran componente emocional y surrealista. A través de una buscada estética vintage, la nostalgia ayuda a crear una tensión psicológica que se expresa frecuentemente en su paleta de colores, vestuario, las fusiones de sus modelos con los escenarios, sus gestos, la performatividad y otros aspectos formales como los reflejos y las repeticiones.
Pasado y presente, interior y exterior, están en constante diálogo. La espontaneidad, la experimentación, y la libertad de la fotógrafa y de sus modelos también tienen un peso importante en la consecución de sus obras. De todo eso hablamos en esta entrevista.

P. ¿Cuándo empieza andadura por la fotografía? ¿Qué ha sido decisivo para que tomaras este camino?
R. ¿Por qué escribimos? ¿Por qué pintamos? ¿Por qué inventamos cosas? ¿Por qué te sacas fotos a ti misma? Cada una de estas cosas tienen sus razones. Para algunos el arte es una vía de escape, para otros es una realización. Para mí, ha sido una vía de escape pero por encima de todo un refugio en un momento particular de mi vida.

P. En tus fotografías la tensión entre el espacio interior y exterior es uno de los temas centrales y el lado performativo es, sin duda, ejecutado de manera muy bonita. ¿Cómo se te ha ocurrido?
R. El espacio, como en las pinturas japonesas, entre los objetos, es el protagonista real de mis fotos. Mi entorno es el «espacio de la belleza», debe contener «la dimensión» de mis pensamientos. Ellos deben ser casi suspendidos y abrazar la forma, la luz y todos los detalles de mis imágenes.

P. ¿Cuáles son tus grandes inspiraciones cuando estás pensando en una nueva serie?
R. Son intuiciones repentinas que no se pueden explicar.

P. Tu trabajo tiene un gran apelo editorial. La paleta de colores, el vestuario y los escenarios contribuyen a crear un aura para representar una mirada introspectiva femenina. ¿Cómo es para ti explorar visualmente estas emociones?
R. Creo que mi fotografía es mi manera de ver. Pertenece a mí profundamente y el secreto reside en nuestro diálogo interno.

P. Tienes una predilección por los ambientes y vestuarios retro, lo que aumenta el aura psicológica de tus retratos. ¿Tus personajes están emocionalmente ligados a su pasado?
R. La figura femenina es la mejor intérprete de los sentimientos con su fragilidad y contradicciones. La atmósfera y las emociones son moldeadas según el observador.

P. Parece que la danza también juega un papel sutil en tus fotos. ¿Eso es así?
R. La música y el arte son una parte importante de los seres humanos. Yo he crecido en un ambiente artístico, siempre me encantó el ballet. Cuando era una niña me gustaba ir al teatro con mi padre. Creo que el teatro es la expresión máxima de la libertad humana. ¡La magia! Eso me ha enriquecido el alma.

P. La mayoría de tus personajes aparecen solas en la escena, pero cuando no están solas están acompañadas de sí mismas a través de repeticiones, reflejos en el espejo o de su propia sombra. ¿Qué te mueve para establecer esta aproximación psicológica?
R. Siempre me ha fascinado el tema de lo doble. Todos tenemos una parte oculta.

P. ¿Cómo eliges tus modelos y qué tipo de relación estableces con ellas para conseguir la mejor foto? ¿Qué te funciona mejor, la escenificación o la improvisación?
R. Yo prefiero modelos que no sean profesionales. Suelo crear un espacio donde la modelo puede moverse espontáneamente y así voy captando lo que necesito. Solo en algunas ocasiones les doy alguna instrucción.

P. ¿Qué medio prefieres, digital o analógico?
R. Personalmente utilizo digital. Uno no es mejor que el otro, todo depende de la aplicación final. Creo que es la artista y no el medio lo que define la calidad.

P. En términos de producción, ¿cuánto te lleva a ti o a tu equipo encontrar la locación y la modelo adecuadas?
R. Toma tiempo la búsqueda. Observando la realidad todos los pensamientos son actos creativos. Cada aspecto, formas, fondos, modelos, colores, luz, composición y detalles tienen un papel importante en mis fotografías.

P. En uno de tus proyectos experimentales, Alternative perspectives, el color, la simetría y la repetición tienen un papel fundamental. ¿Cómo elaboras estos aspectos formales en tu proceso creativo?
R. A través de este proyecto, la alteración de las perspectivas crea en sí una percepción alternativa. El espacio y el ambiente son los grandes protagonistas, pues el proyecto es una exploración de la forma y el espacio. La serie, que sigue en marcha, se compone de imágenes producidas en diferentes lugares: Italia, Berlín y Eslovenia. Creo que es la libertad artística la que cobra importancia a la hora de determinar el estilo, pero la experimentación es la clave.

P. Sacamos y vemos miles de fotografías cada día. Esta actividad es más que nunca una parte de importante de nuestras vidas. Sacamos muchas pero descartamos la gran mayoría. En tu opinión ¿qué es una buena foto?
R. Creo que el elemento más importante de una foto es la habilidad de desencadenar emociones como la curiosidad, la rabia, la tristeza, la alegría, el asombro…






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