Inés Silvalde: «Veo los baños como lugares donde expresar una belleza decadente»

Danielle Cruz Por Danielle Cruz
10 Min lectura
Hablamos con la artista gallega Inés Silvalde sobre su imaginario. Ella ha participado de la feria Hybrid 2022 con Os Catro Gatos

Mujeres trabajadoras y con una vida difícil son las protagonistas de las obras recientes de Inés Silvalde Videla (Santiago de Compostela, 1983). La artista las presentó este año en Madrid, en Hybrid Art Fair 2022, en el baño de la habitación 119 del Hotel Petit Palace Santa Bárbara.

Irónicamente, es precisamente en esta parte de la casa donde casi siempre se encuentran retratadas las mujeres de Inés Silvalde. Quitándose la ropa, sin desconectarse de su trabajo, o simplemente arreglándose para salir. En sus rostros destaca la nariz. Un elemento que es capaz de generar humor y dramatismo según que caso.

En el contexto de estos momentos de auto-cuidado tan auténticos, en el que ellas se miran al espejo, la artista reflexiona sobre el cotidiano de tantas mujeres, sus personalidades y sus vidas sin muchos éxitos.

Descubrí la obra de Inés Silvalde en la habitación de Os Catro Gatos, espacio cultural de Santiago de Compostela que ella co-gestiona. Este año la galería llevó también a Hybrid obras de los artistas José Perozo, Rebeca Lar, Delio Sánchez y Camilo Seira.

Licenciada en Bellas Artes, Inés Silvalde trabaja sus pinturas con acrílico, óleo y acuarela. Además, realiza escultura en papel maché. Ella estudió Diseño de Interiores en la Escuela Pablo Picasso de La Coruña, sector en el que también trabaja. Hoy nos habla de sus obras recientes, las mujeres que representa y sus métodos de trabajo.

 

 

Inés Silvalde - Artista
Inés Silvalde, Amor bizarro, 2019. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. ¿Cómo ha sido la experiencia en Hybrid?

R. La experiencia en Hybrid ha sido fascinante. El hecho de recibir a la gente en un espacio que está configurado como privado me parece muy acertado. De hecho, crea cierto vínculo entre el artista y visitante. Yo lo he comparado con recibir gente en tu propia casa. Eso le da un punto de complicidad entre la obra de arte y el espectador. Es una buena plataforma para conocer artistas y compradores de arte.

Por otro lado, las ventas han ido bien y la acogida ha sido muy buena. Me ha ayudado a reflexionar sobre mi trabajo y he vuelto con ganas de emprender nuevos proyectos.

 

 

Inés Silvalde - Artista - Os Catro Gatos
Inés Silvalde, Ollo ao piollo. Detalle. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. ¿Por qué has elegido marcar la nariz de tus personajes?

R. En la búsqueda de nuevas estéticas en mi proceso artístico, empecé a investigar con las formas y las texturas. De modo inconsciente, esta nariz aparecía al simplificar los rasgos faciales en la composición de los rostros. Además, con la idea de cambiar los códigos formales de mis trabajos pictóricos, sentí una gran atracción por representar personajes con una belleza poco convencional o incluso buscando la fealdad. Además, la nariz, junto con los dientes, me ayuda a representar entes absurdos y bizarros.

La nariz tiene su protagonismo a través del color blanco y utilizando relieve. De modo que lleva la mirada del espectador directamente a ese punto en el que la figura se dota de más humor o de más dramatismo dependiendo del contexto.

 

 

Inés Silvalde - Artista - Os Catro Gatos
Inés Silvalde, Deconstrucción, 2019. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. Tus personajes aparecen en momentos íntimos, en el baño, quitándose la ropa y mirándose al espejo. ¿Qué historia tienen detrás?

R. La ducha y el agua han sido, en momentos importantes personales, elementos que funcionaron como terapia. Ya el cubículo del baño se convierte en una especie de confesionario donde tomar decisiones fundamentales. Por otro lado, yo funciono como modelo de los cuadros.

De hecho, los momentos previos a arreglarme para salir de casa me parecen los más auténticos para expresar las ideas que intento transmitir a través de mis cuadros: mujeres arrolladas por la vida cotidiana que intentan alcanzar el amor, la belleza, el trabajo, en general vida idílica, sin éxito. Encuentro en los viejos baños un lugar donde expresar esa belleza decadente.

 

 

Inés Silvalde - Artista - Os Catro Gatos
Inés Silvalde, Rider, 2019. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. ¿Cómo llegas a estas composiciones? ¿Qué es una buena imagen para ti?

R. En primer lugar, parto de una imagen poco ambiciosa. Una foto sacada con el móvil, siendo fiel a esa idea de belleza cutre. Una imagen que me parezca lo suficientemente patética en la que ins- pirarme. El móvil como medio de captura de instantáneas también es algo común en nuestra sociedad.

Comienzo a pintar dejándome llevar por las ideas que van surgiendo. Durante el proceso pictórico añado elementos con los que complementar la idea inicial. Dejo que fluya y me lleve a algún estadio de mi pensamiento que yo desconocía. Una buena imagen para mí es aquella en la que existan contrastes. Que se encuentren elementos logrados pero pinceladas ingenuas, así como chorretones. De hecho, la expresión en la pincelada es algo con lo que me identifico.

 

 

Inés Silvalde, O coche levoo e lavoo eu, 2019. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. Tus obras tempranas parecen ligadas a la infancia, ¿es así? ¿Qué te inspiraba entonces?

R. En esas obras buscaba un cambio en mi registro pictórico. Por eso comencé a utilizar formas y colores que nunca me había planteado. Por otro lado, ayudaban a expresar sentimientos propios de una época en concreta: el embarazo de mi hijo Alén.

El embarazo despertó en mí una actitud de alerta ante algunas cuestiones de la sociedad que me rodeaba. Así que estaban inspirados en conversaciones, frases de canciones o titulares de noticias que me desagradaban como mujer y futura madre. Por eso, era una manera de caricaturizar y emplear el humor para representar ese estado de enfado que me acompañaba en el día a día.

La verdad es que está ligado a la infancia como una actitud de expresión de sentimientos de manera espontánea, dejando de lado la cordialidad. De hecho, algunos de los cuadros expresan gestos y actitudes propios de la adolescencia e infancia.

 

 

Inés Silvalde, Unha tarde na toxeira, 2020. Óleo sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. Me podrías contar más de Os Catro Gatos, ¿cómo surgió, cómo os gestionais, y qué desafíos trae?

R. Os Catro Gatos es un proyecto que surgió bajo la necesidad de encontrar un espacio dónde desarrollar mis proyectos pictóricos. Además, nació como un proyecto abierto donde compartir espacio con otros artistas realizando exposiciones mensuales en Santiago de Compostela. A lo largo de los cinco años hemos hecho exposiciones, micro-conciertos, presentaciones de libros, talleres, así como múltiples actividades que configurasen un espacio vivo.

 

 

Inés Silvalde, Suave como una palmera, 2019. Técnica mixta sobre lienzo. Cortesía de la artista

 

 

P. ¿Cuáles son tus próximos proyectos?

R. En las próximas semanas comenzaré una serie de obras de carácter intimista en las que la mujer y la tristeza serán las protagonistas. De hecho, el fin de este tema es reflexionar sobre algunas situaciones de la vida cotidiana que nos causan desaliento pero que no siempre son manifestadas, reconocidas o valoradas como la actitud correcta.

El proyecto tiene, fundamentalmente, una proyección pictórica pero tengo en mente desarrollar algunas piezas escultóricas en tela y espuma. La belleza decadente será aquí también la línea estética que voy a seguir, buscando escenarios interiores que inspiren el concepto de belleza en decadencia.

 

Puedes ver más obras de Inés Silvalde en su perfil de Instagram.

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Es editora de elemmental. Doctoranda en Comunicación. Estudió Edición y Filosofía. Amante del arte y los nuevos medios. Estuvo antes en el Cultura/s del diario La Vanguardia.