Un nuevo espacio de arte y pensamiento en Valencia

Tátylla Mendes Tátylla Mendes
12 Min Lectura
‘Monumento’, primera exposición individual en España del artista argentino Matías Ercole, inaugura el nuevo espacio de Jorge López Galería. Hablamos con artista y galerista sobre la muestra

Este año, tras medio siglo de vida, la histórica Galería Punto de Valencia encontró su punto final. Un cierre que no vino acompañado de pésame sino de celebración, por la apertura de un nuevo espacio. El 28 de abril, Jorge López, quien fue director artístico y, luego, propietario de Punto, abrió las puertas de la nueva Jorge López Galería.

«Lo pensé mucho», nos cuenta Jorge, pero al final, «la idea que tuviera el nombre era hacerse cargo de lo que uno está haciendo». La decisión del galerista, además de darle a Punto el buen remate que toda buena historia merece, aún trae nuevos aires a la ciudad.

 

 

 

Matías Ercole - Jorge López Galería - Valencia
Matías Ercole, Monumento, 2022. Tinta y cera sobre papel entelado. Cortesía de Jorge López Galería

 

 

 

Nueva ubicación y nuevas propuestas

 

Lo innovador de Jorge López Galería no radica solo en su nuevo nombre. La ubicación de ese centro de arte contemporáneo también ha cambiado. El nuevo espacio está en el barrio de La Roqueta, entre la Ciudad Vieja, l’Eixample y el Botánico, a solo unos pasos del MuVIM.

La calle Padre Jofre, 26, fue la nueva dirección elegida por Jorge López. Un doble salón todo blanco con una escalinata en espiral en la entrada y una amplia trastienda. El espacio –ligeramente más pequeño que el anterior, aunque bastante acogedor– estuvo repleto el día de la inauguración.

Además, la propuesta artística ahora es la de trazar «puentes de dos direcciones entre Iberoamérica y Europa». Así que nuevos nombres se van sumando a la lista de artistas que ya tenían relación con la galería. La primera exposición en Valencia del artista argentino Matías Ercole (Buenos Aires, 1987), inaugurada simultáneamente al nuevo espacio, es prueba de ello.

 

 

 

Matías Ercole - Jorge López Galería - Valencia
Matías Ercole, Luz Rara, 2022. Tinta y cera sobre papel entelado. Cortesía de Jorge López Galería

 

 

 

‘Monumento’, de Matías Ercole

 

Para Platón, la luz emanaba del ojo. Para Descartes su funcionamiento era, más bien, mecanicista. Mientras tanto, Matías Ercole la aborda no sólo como un fenómeno técnico, eléctrico, físico o meteorológico, sino también como algo místico y poético. La luz –elemento central de sus obras– hizo todavía más brillante la inauguración de Jorge López Galería.

«Me interesa como un elemento confluye tanto. Como algo que no tiene materia puede estar presente en un montón de situaciones. Está en la religión, la iluminación, la intelectualidad. O sea, que la luz puede ser muchas cosas», comentó el artista.

Así como Miguel Ángel trataba de revelar la estatua que había dentro de cada bloque de piedra, Ercole trata de revelar la luz detrás de cada tela. Primero, las cubre con tinta negra y cera sobre papel, ya que «no existe luz sin oscuridad», dice. Después, con cuchillas, agujas y otros instrumentos, va haciendo que la luz se filtre por entre sus paisajes de ensueño.

Ahora, en Monumento –a distinción de sus obras anteriores, casi todas monocromáticas– esa luz se vuelve extasiada, gana color. Matías nos cuenta sobre el proceso de investigación que le llevó a hacer dicho cambio:

«Una experimentación que hice con una obra, después que la rayé, la miré y eso que yo creía que era blanco, cuando lo miro, era naranja. Además, el elemento luz, según la manera que adquiere, tiene color, ¿no? El fuego es rojo o es amarillo, o nosotros le hemos agregado eso. Me interesa todo eso, cómo se mezclan nuestras percepciones internas con esas instituciones físicas».

«Eso de descubrir que la luz tenía color creo que también se cruzó con estar en Europa, viviendo, y querer hablar de esa situación de identidad. Empecé a investigar también cómo se ha representado la luz desde mi geografía», añadió el artista.

 

 

 

Matías Ercole hace los últimos retoques en su obra. Foto: Tátylla Mendes

 

 

 

La visión del galerista

 

Jorge López nos cuenta que la idea de empezar la historia de la galería con Monumento partió de la intención de presentar «un proyecto con características que están muy vinculadas a la historia del arte. Porque esa es la historia de los símbolos y de la humanidad. Entonces, aquí también hay esa relación. Vamos a sentir que en esa exposición hay muchas cosas que conocemos, pero hay muchas que tenemos que descubrir; que es un poco a lo que se vincula la galería».

Argentino que adoptó Valencia en 2004, López tiene los ojos del color del mar e ideas igual de profundas.

Para él, «las galerías tienen que tener una investigación y un sentido. O sea, que la galería, más allá de la relación mercantil, también está contando una historia, por medio de sus artistas. Son pequeñas historias contadas por distintos autores y la galería es quien ordena esa narración. Así como si fuera una línea editorial».

De hecho, López ya ha dicho más de una vez que ve las galerías de arte como espacios de pensamiento, que generan diálogos y contribuyen con la educación visual del público.

«Somos espacios gratuitos, abiertos al público, con la posibilidad de mirar hoy lo que mañana verás en un museo. Entonces, en vez de mirarlo cuando la historia lo está contando, uno puede formar parte de la historia. Creo que si la gente se diera cuenta de eso, visitaría mucho más las galerías».

Esa idea de ser un testigo del presente es, de hecho, lo que hace que el galerista sea un apasionado de su profesión. «Yo creo que lo haces primero porque conectas con personas y segundo porque es una forma muy bonita de vivir. O sea, trabajar con algo que está íntimamente relacionado con lo que está pasando en tu momento», dijo Jorge.

 

 

 

Jorge López y Matías Ercole el día de la inauguración del nuevo espacio. Foto: Tátylla Mendes

 

 

 

Ideas en armonía

 

«Yo confío en la imagen como un ente que comunica. Creo en los colores. Creo que la forma devuelve cosas, y uno conecta con su inconsciente y con signos. Como dice Jorge, yo también apelo al pensamiento y a los cruces, ese interno y más visceral y otro intelectual. Y, bueno, a ver qué sucede de ese cruce, qué diálogos eso genera».

La sintonía de ideas entre artista y galerista queda evidente en afirmaciones como esas, hechas por Matías Ercole durante nuestra entrevista. Y es él mismo quien nos habla de la importancia de esa conexión.

Según Ercole, «una parte del trabajo de la galería también es el cuidado con el artista. Porque hay que vender, sí. Necesitamos comer [risas]. Pero estamos trabajando también con sensibilidades, de algún lado, supongo. Entonces, es bonito cuando hay alguna atención a esa sensibilidad, cuando uno tiene una relación de apoyo y amistad».

El artista dice que no siempre eso pasa. Pero el nuevo emprendimiento de Jorge López sí que ya nace con ese espíritu. La presencia de otros artistas de la galería –como Amparo Tormo, Inma Femenía y Oliver Johnson– en el evento de inauguración del nuevo espacio es una señal de esa buena relación.

Jorge López complementa: «El artista no puede hacerlo todo, ni tampoco puede vivir solamente de premios o de becas. Están muy bien los premios, becas, residencias. Pero la galería es el eslabón, es quien está defendiendo a capa y espada la labor del artista, y que ha creído en él desde el inicio».

La afirmación del director de Jorge López Galería se vuelve todavía más significativa al final de nuestra charla, cuando él anuncia con una expresión de orgullo paternal: «¡Ahora, después de aquí, Matías se va a Arco Lisboa!».

 

 

 

Jorge López Galería el día de la inauguración del nuevo espacio. Foto: Tátylla Mendes

 

 

 

Nuevas utopías

 

Hacer que las instituciones se fijen en los artistas y que el sistema legitimador los adopte es, de hecho, uno de los grandes anhelos de las galerías, según López.

Aunque no paran por ahí los deseos y sueños del creador del concepto ‘nowtopías’ –hilo conductor de la programación de la galería este año–. Jorge dice que la idea le llegó durante el confinamiento por la pandemia. Para él, que tras todo lo que pasó haya, ahora, una guerra solo reafirma la necesidad de crear nuevas utopías.

¿Y cuáles son las vuestras? –le preguntamos al director de Jorge López Galería.

«Desde ya, abrir una galería ya es una utopía, porque estás creando una nueva realidad paralela a lo que hay. Y abrir una galería en esos tiempos es todo un reto. Pero yo creo que las cosas hay que hacerlas. Hay que arriesgar. Es un poco mi filosofía».

Aún así, Jorge dice que cree que «debería haber una ayuda institucional a las programaciones de las galerías. A las programaciones [refuerza]. Ojalá conseguiremos eso, que las galerías sean una responsabilidad no solamente privada, sino pública. Porque las galerías forman parte de lo que nos cambia, de lo que hace que la sociedad sea mejor o peor».

Al fin y al cabo, «lo que buscamos con la galería también es crear una utopía. Es hacer un espacio donde se pueda llegar a estar mejor» –concluye Jorge López–.

 

‘Monumento’, de Matías Ercole, puede verse en Jorge López Galería hasta el 17 de junio de 2022.

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Comunicadora, cronista y publicista. Coautora de los libros 'Mosaico: 33 historias sobre la vida tunecina' (Autoedición, 2019), 'Viaje a la madre Tierra' (Livingstone, 2019) y 'Puentes' (Gato Blanco, 2021).