Los autores nos hablan de su reciente colaboración en ‘Una palabra random’, libro publicado en septiembre de 2021, y que une poesía y arte
A veces los libros se convierten en un artefacto que, por su belleza, quieres tener cerca siempre. En el caso de ‘Una palabra random’, delicadamente editado por Aristas Martínez (2021), esta belleza viene dada por la magia de los poemas de Nacho García. Con sus textos es hasta capaz de realzar el exotismo de Logroño.
Los collages de Mauro Entrialgo que acompañan a estos textos lo hacen de una manera muy natural. Estas creaciones enfatizan, a través de texturas y colores, aquellas palabras que Nacho declama.
No se trata de un poemario al uso sino de reflexiones humorísticas y surrealistas en forma de poemas. Dada esta personalidad lírica, hacen las delicias de un lector cansado ya de la intensidad fallida de muchos poetas contemporáneos.
‘Una palabra random’ son reflexiones humorísticas y surrealistas en forma de poemas
Nacho García (Logroño, 1987) es artista multidisciplinar. Ha escrito los libros de arte «Pulir» (2013) y «Star» (2019), ambos publicados por Fulgencio Pimentel. También es autor y vocalista en Elías e Ignacio. Ha publicado y expuesto sus textos en numerosas antologías, exhibiciones, fanzines, revistas y artefactos de diversa índole tanto en el territorio nacional como internacionalmente. Es docente en el Instituto Europeo de Diseño de Madrid, donde vive y trabaja.
Mauro Entrialgo (Vitoria-Gasteiz, 1965) dibujante y colaborador de la revista ‘El Jueves’, entre otras publicaciones. Ha publicado medio centenar de libros de historietas, varias obras de teatro, docenas de canciones, pintado muchos murales y realizado una serie de videoarte doméstico. Entre sus personajes de historietas más conocidos se encuentra Hermino Bolaextra o Ángel Sefija.
Hablamos con los dos autores sobre lo que ha supuesto esta colaboración, cómo le han dado forma y otras cuestiones que atañen a sus ámbitos artísticos.
P. Los dos: ¿cómo ha surgido esta colaboración?
Nacho: Yo estoy pasando por un momento, no sé muy por qué, aunque tengo mis sospechas, en el que me interesa más generar imágenes mentales que otra cosa. El texto y la estructura de la poesía me van muy bien para eso, de momento. Cuando me decidí a poner algunos de estos textos en Twitter y Mauro me propuso hacer un libro no pude decir que no. No solo porque me encanten sus collages y pensara que iban a casar muy bien, sino porque llevo siendo fan incondicional de Mauro desde que era un prepúber. Y, aunque nos conozcamos y seamos amigos desde hace años, era un regalo que tenía que hacerle sí o sí a aquel pequeño Nacho y a este Nacho de ahora.
Mauro: Siempre me ha gustado mucho todo el trabajo de Nacho en distintas parcelas artísticas. Sin embargo, cuando comenzó a escribir poemas y poner algunos en redes sociales me sentí tan cercano a ellos que quise involucrarme con ese cosmos de forma más cercana que como simple lector. Se me ocurrió que podían dialogar muy bien con el tipo de collages que llevo haciendo desde hace años en la intimidad. Se lo propuse a Nacho, a él le pareció bien la idea y terminamos confeccionando este libro.
En mi caso (la inspiración) no tiene más misterio que sentarse en silencio con un folio, un boli y unas cuantas palabras aleatorias. Y pensar en ellas hasta que se generan estas asociaciones de ideas
P. Nacho: ¿Dónde encuentras la inspiración para tus poemas?
R. En todo lo que me gusta y me disgusta, en todo lo que me importa y en todo lo que me da igual. En mi caso no tiene más misterio que sentarse en silencio con un folio, un boli y unas cuantas palabras aleatorias. Y pensar en ellas hasta que se generan estas asociaciones de ideas. A veces ocurre mejor, a veces peor y a veces no ocurre nada. Me gusta mucho que el libro se llame Una palabra random por esto mismo.
P. Mauro, ¿por qué has optado por la técnica del collage para ilustrar estos textos?
R. Los poemas de Nacho apuntan siempre a muchas direcciones y abren puertas a muy distintos habitáculos mentales. Acompañarlos de ilustraciones tradicionales con un significado muy concreto que los acotase me parecería domesticarlos. Prefería sumarme a su registro y dedicarme a abrir todavía más puertas.
Creo que tanto en la obra de Mauro como en la mía el humor aparece, entre otras cosas, como terapia. Es una herramienta muy útil para intentar poner algo de orden y sentido a una existencia tan extraña
P. ¿Es la retranca el motor de este libro tanto en la parte escrita como en la plástica?
Mauro: Creo que es un artefacto que funciona gracias a varios motores que operan tanto en los textos como en las imágenes. Además del motor del humor, hay por ahí otros de semejante importancia, o incluso mayor en determinadas piezas, como la melancolía, el arte o el interés por recurrir a lo muy concreto para hablar de lo universal. Son motores que no es demasiado habitual ver funcionar juntos. Por consecuencia, su acción conjunta puede producir cierta sensación de extrañamiento, pero esperamos que también de maravilla.
Nacho: No sabría explicarlo mejor. Creo que tanto en la obra de Mauro como en la mía el humor aparece, entre otras cosas, como terapia. Es una herramienta muy útil para intentar poner algo de orden y sentido a una existencia tan extraña y a un mundo tan raro.
P. Nacho, ¿en qué se diferencia un poema de una reflexión graciosa?
R. Yo no sé mucho de poesía y ni me considero un poeta ni lo pretendo ser. Para mí, la poesía tiene que ver, sobre todo, con el relato de lo inefable, precisamente por la contradicción y la mística que supone eso. La poesía tal como se entiende normalmente va muy bien para esto. En cambio, si se dan ciertos condicionantes, uno puede encontrar lo mismo en una nota informativa de una comunidad de vecinos, por ejemplo. Así que para mí un poema y una reflexión graciosa se pueden parecer en todo y en nada, dependerá del receptor y del momento.
Intento no ser nunca evidente, ni siquiera en el uso del color
P. Mauro, ¿existe algún código emocional o simbólico en el uso del color que has elegido?
R. Intento no ser nunca evidente, ni siquiera en el uso del color. Pero sí, por ejemplo, en el poema se habla de que algo está muy sucio, pues me sale usar el marrón caca. Que no debemos confundir con el marrón café, claro, que sugiere un entorno más acogedor y con mejor olor.
P. ¿Cuál creéis que es la mejor estrategia para combatir el machismo en todos los ámbitos laborales donde os movéis?
Nacho: En mi caso, como docente, procuro que exista igualdad en la cantidad de referentes masculinos y femeninos que enseño en clase. Cualquiera que tenga un curro algo creativo sabe que sus referentes son sobre lo que se apoya todo lo demás. Me parece importante dejar claro desde el principio a la chavalería la enorme cantidad de mujeres que han contribuido a la Historia del Arte y el diseño cuyos nombres tradicionalmente han pasado totalmente desapercibidos.
Mauro: En el ámbito de mi casa, que es donde suelo trabajar, suelo tener pocas oportunidades de desarrollar estrategias para combatir el machismo ajeno. Sin embargo, el propio se intenta combatir mirando a menudo las actitudes propias desde fuera, como se mirarían las de un desconocido.
Como docente procuro que exista igualdad en la cantidad de referentes masculinos y femeninos que enseño en clase. Cualquiera que tenga un curro algo creativo sabe que sus referentes son sobre lo que se apoya todo lo demás
P. ¿Habéis dejado una puerta abierta a nuevas colaboraciones juntos?
Nacho: Yo encantado de la vida.
Mauro: Mi idea, al menos, es seguir sacando libros de poemas y collages con Nacho hasta que nos dejen. Ahora mismo, yo creo que tenemos material para otros dos.
P. ¿En qué estáis trabajando ahora?
Nacho: Yo sigo con mis clases, escribiendo y con algunos proyectos que están todavía tan en pañales que prefiero no decir nada, no vaya a ser.
Mauro: Al margen de mis colaboraciones habituales de humor gráfico para diversas publicaciones, mis próximos proyectos a medio plazo incluyen un ensayo sobre los mecanismos del discurso humorístico, una exposición de pintura figurativa sobre santos auxiliadores, y un mediometraje de cine doméstico a partir de los superochos que rodó mi padre en los años 70.
Nacho García, Mauro Entrialgo, Una palabra random, 2021. Aristas Martínez. 112 páginas. 15,20 €
