Paula Rego: la vida secreta de lo cotidiano

Miriam Varela Por Miriam Varela
12 Min lectura
La Tate Britain presenta la mayor retrospectiva de la artista hasta la fecha, una invitación a sumergirnos en su universo pictórico tan particular como desconcertante

Si quieres leer una historia agradable, bonita llena de colores pastel, esta no es tu artista. Paula Rego (Lisboa, 1935) sí utiliza el pastel como técnica, pero no para endulzar la realidad, sino para darnos un buen baño de ella. Baño por supuesto en agua bien fría.

La artista se ha dedicado toda su vida a narrar, a contar historias. Pero no las más bonitas sino las reales, las crudas, las que normalmente no queremos ver, las que separamos para quedarnos con la cara benévola de la realidad. Muchas de ellas podrán verse en la exposición que organiza la Tate Britain en colaboración con Kunstmuseum Den Haag y Museo Picasso Málaga, del día 7 de julio y hasta el 24 de octubre de 2021.

Londres acoge la mayor retrospectiva hasta el momento de la artista. No es la primera exposición que el museo dedica a la luso-londinense, ni la primera retrospectiva de la artista ya que el Museo Reina Sofía de Madrid le dedicó una en 2007, pero sí la más amplia. Paula Rego está comisariada por Elena Crippa, curadora especialista en arte moderno y contemporáneo, con Zuzana Flašková, curadora asistente de arte británico moderno y contemporáneo de la Tate Britain.

Componen la exposición más de cien obras entre collage, pinturas, pasteles, dibujos y grabados; desde sus inicios en los años cincuenta como Interrogation (1950), realizada por la artista con tan solo quince años, hasta obras más actuales como la desconcertante serie de The Pillowman (2004). La muestra nos permite construir un recorrido a lo largo de todas las etapas creativas de Paula Rego prometiendo, como hacen sus obras, no dejar indiferente al público.

 

 

 

Paula Rego, Interrogation, 1950. Private Collection, London © Paula Rego

 

 

 

Paula Rego nació en Portugal en 1935, poco antes nacía también en el mismo país el régimen de Salazar, el Estado Novo. La represión y la violencia de este período marcaron a la artista que lo reflejó ya en una de sus primeras obras: Interrogation (1950).

Pronto se iría a vivir a Londres animada por sus padres, que deseaban que creciera en un país liberal. Allí continuó sus estudios en la Slade School of Fine Art de Londres. Es en esta mezcla de legado portugués y espíritu londinense donde nace en realidad toda la iconografía latente en su obra, como veremos a continuación en las diferentes etapas de su obra.

 

 

 

Paula Rego, The Artist in Her Studio, 1993. Leeds Museums and Galleries (Leeds Art Gallery) U.K. / Bridgeman Images © Paula Rego

 

 

 

La violencia política

 

A partir de los años sesenta y en la década de los años setenta, Paula Rego se dedicó a la realización de collages. Obras formadas por recortes de papel, pintura y dibujos en los que crea un universo de base surrealista. La forma abrupta, violenta de crear estos cuadros es acorde a los temas que refleja en ese momento en su obra: la impotencia y la rabia que le generan los acontecimientos políticos que suceden a su alrededor.

La violencia del régimen portugués siguió presente pero también la brutalidad de las ocupaciones coloniales, las atrocidades del régimen franquista como demuestra su obra Stray Dog (Dogs of Barcelona) (1965).

De este período también es su obra Self-portrait in Red (1966).  Un autorretrato –escasos en su obra– en el que podemos ver una fantasía de pequeños motivos que se mueven de la ternura y alegría hasta lo violento, creados por papeles desgarrados y cortados de forma agresiva.

 

 

 

Paula Rego, Self-portrait in Red, 1966. Museu Nacional de Arte Contemporanea do Chiado (Lisboa, Portugal) © Paula Rego

 

 

 

El fin del “ángel del hogar”, la nueva mujer

 

Tras el abandono del collage en los años ochenta, la artista se sumergió en un mundo de animales humanizados, simplificando la forma y el número de figuras en sus obras. Figuras de contornos gruesos y colores en muchos casos estridentes que nos cuentan historias violentas. Como son Red Monkey Beats His Wife (1981).

A mediados de los años ochenta, comenzó a explorar y reivindicar temáticas alrededor de la figura de la mujer que buscaban enseñar realidades personales. A raíz de la enfermedad degenerativa que sufrió su marido, el también pintor Victor Willing, la artista creó una serie de grandes lienzos en acrílico relacionados con los cuidados, con el amor, pero también con la dependencia.

La última de ellas The Dance (1988), en la que se representó sola, bailando en una escala mayor que el resto de los personajes, mirando al público; mientras que su marido baila con otra mujer a la que no le vemos el rostro. Esta serie afianzó el reconocimiento internacional de la artista y la situó como referente de la nueva figuración.

 

 

 

Paula Rego, The Dance, 1988. Tate © Paula Rego

 

 

 

El aborto, mutilación y enfermedades mentales

 

Otra de las realidades que nos enseñará, ya en los años noventa, será la del aborto clandestino. En su juventud la artista pasó por varios abortos antes de decidir seguir adelante con uno de sus embarazos. Por ello, cuando en Portugal, su país natal, se debatió en aquellos años la posibilidad de legalizar el aborto, ella sintió la necesidad de pintar esa realidad.

Chicas jóvenes, vestidas muchas veces de uniforme de colegio, abortando de una forma clandestina. Los lienzos enormes muestran a mujeres en una situación de vulnerabilidad al tener que realizar estas prácticas en un ámbito que no es clínico. Sin embargo, las mujeres no se muestran vulnerables. Son mujeres fuertes, que miran al espectador. Mujeres que han tomado una decisión.

 

 

 

Paula Rego, The Little Murderess, 1987. Private Collection, England © Paula Rego

 

 

 

Estas obras, por su tamaño, eran difíciles de mover. La artista no podía permitir que se quedaran en la intimidad de su estudio por lo que hizo numerosos grabados de ellas para promocionarlas. Estos grabados se reprodujeron tanto que se convirtieron en las imágenes de las campañas en favor del aborto legal en Portugal. Ya en esta época, Paula Rego se hizo “viral”. De este modo se convirtió, gracias a su arte, una vez más en testimonio de la historia.

Realidades vividas por la mujer como la mutilación genital femenina y la violación también se reflejan en la obra de la artista. La catalogación como enfermedad mental de diferentes estados anímicos por los que pasaban las mujeres, y que en muchos casos se veían en el siglo XIX como síntomas de posesión demoníaca la llevó a pintar a principios de los 2000 la serie Possesion I – VII basada en fotografías de las pacientes diagnosticadas bajo esta “dolencia” en la que intenta empoderarlas a través de la expresión de su sexualidad.

 

 

 

Paula Rego, Possessions I, 2004. Museu de Arte Contemporanea Fundação de Serralves (Porto, Portugal) © Paula Rego

 

 

 

 

Como decíamos al inicio, Paula Rego es una contadora de historias. No es de extrañar que en algún momento de su trayectoria se gire hacia los motivos de la cultura popular.

Los cuentos y canciones infantiles sirvieron a la artista, a finales de los ochenta y en los años noventa (época particularmente fructífera en su producción), para crear una serie de obras en las que analizaba las letras e reinterpretaba el contenido. Ejemplo de ello es la serie de grabados Nursery Time (1989) en la que ilustra canciones infantiles británicas tradicionales.

A esta reinterpretación de lo tradicional también pertenece el grabado Flood (1996). Paula Rego creó nuevas lecturas de cuentos populares como son las series sobre Peter Pan, Pinocho y Blancanieves como podemos ver en Cast of Characters From Snow White.

 

 

 

Paula Rego, Flood, 1996. Adquirida por Tate en 1997 © Paula Rego

 

 

Trayectoria

 

Paula Rego es una artista con una gran trayectoria profesional que ha sido reconocida por numerosas instituciones como uno de los pilares fundamentales de la nueva figuración. En 1989 fue nominada al Premio Turner que otorga la Tate. En 1990 se convirtió en la primera artista residente en la National Gallery de Londres.

Ha sido nombrada Doctora honoris causa en diferentes universidades, entre ellas la Universidad de Oxford, el London Institute, la Universidad de Cambridge y la Universidad de Lisboa.

No le faltan reconocimientos tampoco en su país natal en el que en el año 2009 se inauguró el museo Casa das Historias Paula, en Cascais, dedicada tanto a su obra como a la de su marido Victor Willing.

Allí también recibió el año 2013 el Gran Premio Amadeo de Souza-Cardoso (Consagración) en el Museo Municipal Amadeo de Souza-Cardoso, Amarante; en 2016 la Medalla de Honor de la ciudad de Lisboa y la Medalla al Mérito Cultural del Gobierno Portugués, entre otros.

 

‘Paula Rego’ podrá visitarse en Londres del 7 de julio al 24 de octubre de 2021 en la Tate Britain.

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Divulgadora cultural. Licenciada en Historia del Arte por la USC, máster en Escritura Creativa en Hotel Kafka. Cofundadora y coordinadora en La Roldana Plataforma.